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En el Bicentenario de la Independencia, se celebra el Día Mundial contra el Trabajo Infantil. Una de las cosas que se mostrará durante este día, es la cara amarga de la pobreza paraguaya, con niños que pasan frío, y mendigan por las calles.

Este día, coincide con el Día de la Paz del Chaco. En Paraguay, se estima que hay casi 300 mil niños que son afectados por la explotación y la pobreza, aunque hay instituciones, como la UNICEF, que señalan que son mucho menos. El que las cifras no concuerden entre las instituciones que se deben hacer cargo de censar este tipo de problemáticas sociales, ya nos da un indicio de lo mal organizado que esta el país en su gobierno.

Nosotros podremos creer que son solo 6 mil, o 300 mil niños los que se ven aproblemados en Paraguay, y no hace una gran diferencia, porque poco podemos hacer. Sin embargo, las autoridades competentes del país, y la misma población paraguaya, deberían preocuparse de tan grandes diferencias, porque una cosa es ocultar la realidad y otra tratar de solucionarla.

Se habla de inoperancia a nivel de Estado, que siempre llega tarde con la ayuda, pero hay que convenir algo, que el Estado por si solo no funciona sin ayuda de los ciudadanos. Por una parte los ciudadanos pagan con sus impuestos su funcionamiento y por otra, tienen el deber de participar activamente para que se generen iniciativas oportunas. El gran problema está en la desilusión generalizada de la gente por la política, y todos han bajado los brazos. En ese escenario, imposible que otros se hagan cargo de buena manera de sus problemas, si ellos mismos son incapaces de ir por delante. Este es un problema de varios países que sufren el subdesarrollo en Latinoamérica.

Algunos, se ilusionaron cuando se crearon instituciones como la Secretaria de la Mujer, pero todo continua igual, con familias desprotegidas. Yo insisto, al decir que las instituciones no funcionan solas, funcionan por causa de las personas que están dentro de ellas. Y si la gente no los empuja a trabajar, entonces todo seguirá igual.

Vía/ abc, Foto/ (Habacuc_1988) flickr

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