1.jpg

Paraguay es un país que muestra innumerables posibilidades para el turismo, por unas condiciones privilegiadas que se resumen en una geografía variada, un clima tropical que invita al disfrute de la naturaleza, una historia y un arte popular que visten sus pueblos de una fisonomía y una identidad que conquistan al visitante.

Dividido en dos grandes regiones marcadamente diferentes por el caudaloso y emblemático Río Paraguay, el país ofrece a la mirada del viajero dos universos geográficos y culturales ricos en atractivos: la Región Oriental, que abarca grandes comarcas onduladas que muestran campiñas verdes bordeadas de serranías, valles umbrosos surcados de arroyos y lagos, extensos esterales y tupidos bosques, junto a la mayoría de ciudades y pueblos que tiene el país, cuya arquitectura guarda fuertes rasgos coloniales y campesinos; la Región Occidental, que representa el territorio más extenso y también el menos poblado del país, comprende el gran Chaco árico y seco, con extensas y valiosas reservas ecológicas y biológicas, grandes extensiones dedicadas a la ganadería y prósperas colonias extranjeras.

En el Paraguay actual sobreviven 17 etnias indígenas correspondientes a diversos troncos lingüísticos, el más importante de los cuales es el guaraní, que legó a los paraguayos modernos una de las lenguas americanas más admiradas por su riqueza y ductilidad, hablada hoy en día por el 90% de la población.

Los pueblos indígenas, que rondan aproximadamente unos 100.000 habitantes, suman su aporte singular al rico espectro cultural que se nutre también con el contacto con importantes colonias y comunidades fronterizas alemanas, japonesas, brasileñas, argentinas y bolivianas, entre otras. Todo esto configura el amplio abanico cultural que muestra el país en su literatura, su arte, su música, su danza y sus expresiones tradicionales y modernas, que el visitante del Paraguay puede apreciar.

Esta entrada fue publicada en Sin categoría. Guarda el permalink.