El Paraguay fue descubierto por Alejo García y Sebastián Gaboto ambos a las órdenes de España en el año 1524, en tanto la ciudad de Asunción fue fundada en 1537 por Juan de Salazar y Espinosa natural de Medina de Pomar (España) siendo consolidada por Juan de Ayolas.

Tiempos precolombinos

A la llegada de los conquistadores europeos (españoles) el territorio del Paraguay Oriental, es decir el área ubicada entre el río Paraná al este y el río Paraguay al oeste, se encontraba habitado por diversas etnias indoamericanas que se encontraban en estado de guerra entre ellas; estas etnias pertenecían a tres conjuntos diferentes: los pámpidos, los lágidos y los amazónidos.
1.jpg
Ante los avá o «guaraníes» se encontraban las etnias cazadoras-recolectoras de los «ŷes» o lágidos (por ejemplo los ašé-guayakí) y las de los pámpidos destacándose entre este segundo conjunto las etnias llamadas por los guaraníes: agaces y payaguás.
Desde 1604 a 1767 los jesuitas realizan con los indígenas guaraníes de Paraguay un original gobierno teocrático.

Las reducciones jesuitas llegaron a constituir un estado prácticamente independiente, ya que tenían autonomía respecto a los gobernadores de Asunción.

La organización total abarcó 32 reducciones. De esta forma Paraguay perdió la zona marítima del estuario del río de La Plata, y conservó solo Asunción, Ciudad Real y Villa Rica del Guayrá.

En 1750, el tratado de límites entre España y Portugal, afectó a Paraguay con las pérdidas de Guayrá (entre el río Paraná y el Océano Atlántico, la gran provincia del Itatín y la región de Cuyabá que fueron cedidos al Brasil portugués a cambio de la Colonia del Sacramento, en la Banda Oriental del río de la Plata.

En 1777 la provincia del Paraguay fue integrada en el Virreinato del Río de La Plata dentro del cual se mantuvo hasta 1811.

Esta entrada fue publicada en Sin categoría. Guarda el permalink.