El ferrocarril paraguayo, tiene una historia que ya se está rescatando como un vestigio histórico de gran valor en el país de los ñandúes, según dice la leyenda.
No sólo el plan de rescate de lo que fue el ferrocarril en sus mejores tiempos es algo que tienen en mente los encargados de desarrollar el turismo, sino que también, hay planes de crear una ruta bioceánica, que una al Atlántico con el Pacífico, sin contar con las obras que tendrán que realizarse entre Brasil y Argentina.
La red bioceánica que ya tiene en proyecto el Ministerio de Obras Públicas contempla unos 500 kilómetros, y partiría en Presidente Franco, para luego pasar por Encarnación, y finalmente conectarse con Pilar en el sector de Curupayty, aunque la idea es que la conexión termine con Chile.
Este mega proyecto, debería estar listo para el año 2013, de modo que de ahí en adelante, se comience a trabajar en su implementación, que tendría financiamiento público privado.
Los paraguayos están y seguramente estarán siempre orgullosos de sus trenes, porque fueron los primeros en América en implementarlos. Asunción y Sapucai tienen pequeños museos de lo que fueron las locomotoras a vapor, y son estos sitios, los que despiertan una nostalgia penosa en muchos habitantes ya antiguos de esos lados. Así como hay gente a la que indemnizan para tratar de compensarles por la pérdida de sus herramientas de trabajo que tuvieron toda su vida, hay gente que todavía llora por los antiguos trenes.Hay cosas que adquieren un valor que va más allá de lo monetario, porque cuando sólo se pide que regrese el pasado, y no compensa una cuota de dinero por su cambio, es cuando deberíamos sospechar, que ese sitio o objeto, ya tiene un valor sentimental demasiado grande. Algo de esto es lo que les pasa a muchos paraguayos.
Vía/ Fepasa, Foto/ Frronet20.12 (Flickr)